21 de Noviembre

Este día, al inicio de la sesión, Jorge nos invitó a “…compartir algunas luces que nos ayuden a aprovechar mejor, para dar fruto en estos días de asamblea,…” Además, a superar los posibles cansancios de todo el proceso y de estos días de trabajo. Hablando de los puntos de espiritualidad, Pienso que es importante que al revisarlos, incluso al votarlos, lo hagamos tratando de renovarnos e incluso de convertirnos, superando el cansancio natural”

Continuó en su presentación recordándonos que “Hay que discernir el bien posible no el imposible, lo cual no es fácil.  Nos recordó el consejo de San Francisco sobre el discernimiento: ‘si tu hermano te pide algo que va en contra de lo que Dios te pide, no obedezcas a tu hermano, pero no te separes de él’. Es decir, el bien de la comunión auténtica requiere estar dispuesto a disentir pero no a rechazar al hermano

“No olvidemos aquel principio: el que ama no se equivoca porque el amor (en definitiva el Espíritu Santo) es fuente de conocimiento. Así que tratemos de que nuestros juicios estén llenos de amor. Parafraseando a Edith Stein: no aceptes una verdad sin amor, ni un amor sin verdad.”

 

En ese clima, hubo aportaciones muy ricas por parte de los delegados e invitados:

  • Sobre la renovación, la conversión personal, los caminos de Dios, la presencia de Cristo en medio de nosotros y de todo este proceso; y como El se sirve de todo para realizar su plan.
  • Es como el camino de Abraham, dejando de lado las seguridades humanas, sacrificando incluso lo que parece el cumplimiento de la promesa,… Sal de tu tierra,… confía en mi.
  • Recordamos cómo en este proceso, de renovación, conversión y renuncia, se ha de pasar por la Cruz, el dolor, el despojo. Es parte de la pedagogía de Dios y de su plan redentor.
  • Nuestro llamado, a realizar nuestra misión para los demás debe pasar por la purificación y la conversión. Esa conversión nos debe de llevar a sentirnos hermanos en Cristo con todos en el Regnum Christi
  • No opinar sin antes haber orado, así Él puede usarnos como sus instrumentos.
  • Nos necesitamos unos a otros. El que tengamos presencia en la asamblea de todas las ramas no es solo por comunión sino por que de verdad nos necesitamos. La autonomía no es ser islas, ni menos aun dejarnos llevar por el complejo de autosuficiencia. Tampoco es buscar cumplir con expectativas de las otras ramas. Necesitamos que nos ayuden, que nos corrijan, que nos iluminen y nos hagan ver cosas que no hemos visto o entendido.
  • Ha sido muy enriquecedor escuchar cómo las decisiones de cada rama afectan al todo del Movimiento en particular a los laicos no consagrados.

Al inicio de la tarde sacamos una foto de grupo

Por lo demás, continuamos con la revisión del Estatuto y las proposiciones y modos correspondientes de la primera parte y comenzamos con los trabajos sobre la segunda.

Junto con el intenso trabajo, tuvimos momentos de convivencia, así como momentos simpáticos en donde brilló el buen humor y la alegría.